LOS VECINOS PUEDEN TERMINAR CON LAS FIESTAS CLANDESTINAS

SI NO ALCANZAN LOS INSPECTORES MUNICIPALES PARA FRENAR LAS FIESTAS CLANDESTINAS, LAS QUE NO SOLO MOLESTAN POR LOS RUIDOS SINO QUE NOS EXPONEN A TODOS A LOS CONTAGIOS DE COVID 19, DESDE EL GOBIERNO MUNICIPAL DEBERÍAN IMPLEMENTAR UN SISTEMA DE DENUNCIAS, LAS QUE POR MEDIO DE VIDEOS DEJARÍAN AL DESCUBIERTO A QUIENES ALQUILAN SUS CASAS QUINTAS PARA ESTE TIPO DE EVENTOS.

¿CÓMO PARTICIPAN LOS VECINOS, Y AYUDAN A PONER ORDEN?

NI MÁS NI MENOS QUE FILMANDO EL MOMENTO DE LA REALIZACIÓN DE LA FIESTA CLANDESTINA, DESDE LA CUADRA DONDE VIVEN E INCLUSO A LA DISTANCIA, DESDE LOS FONDOS DE SUS CASAS, DESDE LA TERRAZA, DESDE EL LUGAR DONDE PUEDAN OBSERVAR LO QUE SUCEDE Y QUE SE REGISTRE EL ALTO VOLÚMEN DE LA MÚSICA. POR LO QUE ENVIANDO EL VIDEO MEDIANTE LA RED DE WJHATSAPP, DANDO DATOS DE LA DIRECCIÓN POR CALLES DE REFERENCIA Y EL BARRIO DONDE SE REALIZA LA ESTRUENDOSA FIESTA CLANDESTINA, SE COMPARAN ESOS DATOS CON LOS DE OTROS VECINOS QUE HACEN LOS MISMO.

Es decir, que lo que alguien envía como video, se corrobora con otro enviado por otro vecino, se compara el rango horario, la ubicación del lugar denunciado, por lo que de esta manera se certifica la veracidad de la denuncia ¿se entiende?

Quizás no alcance UNA sola denuncia ante un tribunal de faltas, como para que éste actúe en consecuencia, sino que la ratificación de varios vecinos afectados CON SUS RESPECTIVOS VIDEOS, deja por sentado que es cierta tal infracción de parte de alguien que molesta y expone al resto. Repito, no solo por cuestiones de ruidos molestos sino como consecuencia de contagios en medio de una pandemia mundial, porque no alcanza que los funcionarios se justifiquen con eso de que “los pibes quieren salir, estuvieron encerrados todo el año”. Pues, debo decir ante estos argumentos que si se salen para matar o morir, no cuenten conmigo. ALGO HAY QUE HACER! Porque en toda Europa se están viendo los estragos del Coronavirus, y ellos van por la segunda temporada, cuando nosotros no terminamos la primera, y con peores resultados en una economía más pobre.

Por lo que, de tener posibilidades los inspectores municipales pueden ir en el momento de recibir varias denuncias en un determinado lugar. Pero, si están ocupados justamente documentando e infraccionando a otra fiesta clandestina, en la otra punta de Luján, les queda el fiel registro de la fiesta a la que no pudieron asistir durante el fin de semana, por ejemplo, por lo que de lunes a viernes pueden remitirse a ese domicilio denunciado e infraccionar al propietario. Incluso para entregarle una citación, para que dé explicaciones ante el juez de faltas por el asunto de referencia.

Por un lado el costo de una infracción o multa puede desalentar a los organizadores de las fiestas clandestinas, aunque por la recaudación que tendrían con la venta de bebidas, y quizás de otros yerbas, hasta les resulta sencillo y solo termina en un trámite más, luego de un fin de emana de descontrol. Pero, una multa al propietario del lugar, y el hecho de tener que asistir varias veces a los tribunales por haber cedido o alquilado su casa quinta o campo, eso sí puede generar conciencia. Por lo que ante una futura solicitud de alquiler la respuesta sea que NO, QUE NO ALQUILA MÁS EL LUGAR PARA NO AFECTAR A SUS VECINOS, PORQUE LUEGO SE LA PUEDEN VER CON LA JUSTICIA, O PEOR AÚN CON LA BUROCRACIA DEL SISTEMA. A esto último sí que le tienen miedo.

“HACEN PLATA CON LAS FIESTAS CLANDESTINAS”, denuncian los vecinos, y agregan: “POR ESO JODEN TODOS LOS FINES DE SEMANA”. Pero, si los inspectores municipales, escoltados por la policía aparecen de lunes a viernes con móviles de inspección y patrulleros en la casa del dueño, eso redunda en un escrache en el barrio, y se desalienta a la realización de otras fiestas. Es que la gente es mala y comenta.

Estamos seguros que los vecinos mandan videos al instante, SI SE DAN CUENTA QUE DENUNCIANDO DE ESTA MANERA AYUDAN, A PONER EN ORDEN A LOS SEUDO ANARQUISTAS, QUE SE CREEN DUEÑOS DE LA CIUDAD Y DEL SUEÑO TRANQUILO DE SUS VECINOS.