¡Arranco el 2024! Inició el año y con él se renuevan las energías.
Por la Dra. Virginia Busnelli, (MN 110351), Médica especialista en nutrición con orientación en obesidad. Directora del Centro de Endocrinología y Nutrición CRENYF.
Si bien podríamos decir que enero es un mes más, culturalmente está empezando un nuevo año y es una hermosa excusa para ponernos objetivos y proyectar un año distinto. El cierre del 2023 nos hizo replantearnos muchas cosas, analizar lo que se logró y lo que no y proyectar nuevas metas… pero ya estamos en enero, llegó una época que nos invita a la acción, es momento de empezar con aquellas cosas que nos propusimos.
Muchas veces se escucha que para arrancar con el proceso de cambio la motivación es clave y que es algo que nos falta… es importante pensar juntos ¿Mi proceso puede depender de la motivación? Si bien parece que la respuesta automáticamente es SI, es importante saber que sentirnos motivados es el resultado de las decisiones que tomamos y con esto nos referimos a diferentes cosas que pueden ayudarnos en el proceso de cambio.
El planteamiento de objetivos, la curiosidad y la búsqueda de información acerca de lo que quiero, el análisis y planificación de estrategias, la búsqueda de un equipo de profesionales, y hasta inclusive el desarrollo de las acciones… todas estas cosas son las que nos van a motivar a alcanzar lo que deseamos.
Sentirnos motivados ayuda muchísimo para empezar con lo que nos propusimos, pero la realidad es que la motivación se va generando durante todo el camino hacia nuestros objetivos. Tenemos que naturalizar que no siempre podemos levantarnos de la cama súper motivados y es ahí donde tengo que intentar que mi proceso se sostenga por la organización y disciplina mientras sigo en la búsqueda de esa motivación.
Cuando hablamos de cambios hacia una vida más saludable sucede lo mismo. A veces me siento motivado/a y quiero levantarme a cocinar algo saludable e ir a hacer actividad física y otros días no, es ahí donde hacerlo de igual manera va a colaborar con desarrollar esa motivación que en el momento no siento.
Sabemos que el inicio de año también está teñido de verano, vacaciones y salidas lo que hacen más difícil este proceso de “empezar”. Así que no nos pongamos grandes presiones y desarmemos nuestros objetivos hasta poder tener en claro cuáles son aquellos primeros pasos posibles para mi HOY… no hace falta que sea mucho, ni muy grande, al contrario. Una vez allí, en esa instancia, cuando sienta que los primeros pasos ya están dados y son firmes puedo continuar proponiéndome cosas nuevas, paso a paso. Por ejemplo, tal vez hoy no puedo empezar 4 veces por semana en gimnasio ya que la profe se tomó vacaciones o yo me voy unos días y no quiero pagar todo el mes, pero si puedo caminar 15 min todos los días y tal vez dentro de unos meses inicio con las horas de musculación.
Cuando hablamos de salud es importante contar con un equipo profesional que ayude en este camino, ya que no es fácil y juntos es mejor.
Entonces, no hace falta que estés MUY MOTIVADO/A para empezar un proceso de cambio, generá esa motivación mientras te introducís en tus objetivos y acciones y arrancá de a poco para que este año sea distinto y logres todo lo que te propongas.