ESTÁ HASTA LAS MUELAS: UNA FISCAL INVESTIGA A UNA DENTISTA TRUCHA EN LUJÁN, Y LA CITARÁ A DECLARAR

La Fiscal Laura Cordiviola, de la Fiscalía 10 de la ciudad de Luján, es quien tramita una causa por presunto ejercicio ilegal de la medicina, contra Ximena Montes, quien ante los vecinos lujanenses se daba a conocer y era promocionada como “una de las mejores odontólogas de Luján”, siendo Montes conocida en el ámbito mediático y político como candidata a Consejera Escolar, Candidata a Concejal, y hasta con muchas aspiraciones a ser intendente de la ciudad, aunque nunca haya podido ganar nada en sucesivas elecciones.

Esta mujer que es seguida desde hace años los entes que controlar las actividades profesionales, siempre había podido escapar mientras mantuvo un perfil bajo, pero, al incursionar en política comenzó a ser más visible, se expuso más, y no se contenía en sus críticas en diferentes medios de comunicación de cara a cada elección, por lo tanto cada vez subía más alto a una palmera.

Ximena Montes fue inspeccionada en su domicilio particular, y luego denunciada por el Colegio de Odontólogos del Distrito 5to en la provincia de Buenos Aires desde hace mucho tiempo, pero nuevamente se mudó y le perdieron el rastro, aunque por momentos y con diferentes domicilios llegaban las denuncias contra Montes con quejas por sus incursiones en la boca de quienes la visitaban tras engaños.

Pero los profesionales no lograban encontrarla al momento de las nuevas inspecciones, dada la rapidez con que Montes con sus sucesivas parejas mudaba su “consultorio”. Hasta que nuestra investigación periodística dio con datos exactos, sobre quién era, dónde estaba y qué hacía, en contra de la salud de muchos vecinos de nuestra ciudad.

La dentista trucha, y eterna candidata política, provocó desastres en las bocas de decenas y quizás cientos de sus “pacientes”, hasta donde pudimos saber por medio de diferentes fuentes, y fueron muchos los que terminaron perdiendo sus piezas dentales, con los “trabajos” de colocación de dentaduras postizas, luego de limar los dientes rotos con un torno, labores por las que “cobraba la mitad de lo que te cobra un dentista, y lo cobraba en cuotas”, ya que: “Se cobraba con los planes sociales, y te atendía sentándote en el sillón de odontólogo, porque mentía y te decía que era odontóloga recibida.

Pero si vos ya sabías que era una dentista trucha, te hacía sentar en una banqueta, y te agarraba con el torno y te limaba los dientes en la cocina de su casa. Y te hacía escupir la saliva con sangre en la pileta. Y al rato o por la tarde ya pasabas a que te ponga los nuevos dientes”, detalló una de nuestras fuentes. Incluso, algunos delos consultados aseguran que “las dentaduras que vendía eran usadas”, y en este sentido nos contaron: “A mí me puso una dentadura que yo no la sentía cómoda, me hacía doler. Fui al otro día y le reclamé, me hizo pasar, se llevó la parte de debajo de la dentadura a la otra pieza y volvió al rato. Ahí la sentí más cómoda, supuestamente había cambiado algo. Aunque seguía molestando un poco. Pero, me dijo que era cuestión de un par de días, al acostarme la puse en un vaso con agua, y al otro día cuando la quise cepillar, antes de ponérmela, me di cuenta de que eran dientes diferentes, que estaban usados, y que no era la misma dentadura. La terminé tirando a la basura y fui a otro dentista”.

Esta persona no estaba al tanto que Ximena Montes NO es odontóloga, sino simplemente una mecánica dental, que tiene prohibido tocar a los pacientes. Ya que ”los técnicos ortodoncistas son auxiliares de los odontólogos. Ni siquiera tienen el rango de enfermeros”, explicó un médico sanitarista consultado a tales efectos.Incluso, dimos con una mujer que vive cerca de unos de los domicilios en los que atendía Ximena Montes, y tiene su mandíbula afectada, habiendo perdido casi todas sus piezas dentales, por lo que declaró: “Yo pensaba que era dentista. Me la habían recomendado acá en el barrio, y cuando me hizo la dentadura me quedaba grande. Los dientes quedaban sobresalidos. No podía morder, no me podía reír. Pero como SE ME ESTABA PARTIENDO UNA MUELA, AGARRÉ LA ROMPÍ DEL TODO, Y AHÍ LA DENTADURA FUE MÁS PARA ATRÁS. A ahí sí me quedó un poco mejor. Pero igual me molesta”.

Esta “paciente” de Montes agregó: “La semana pasada fui (el pasado 10 de septiembre de 2020), y toqué timbre pero no salía nadie. Había gente adentro, estaba el auto y por el costadito de la cortina en la ventana yo lo veía parado adentro a Gustavo Miano (esposo de Montes), además de que estaba del auto en la puerta. Y si está el auto está Ximena. Porque ella anda con el auto para todos lados, porque también te atiende a domicilio. Así que me ha visto llegar, y se habrá imaginado que le iba a reclamar. Porque fui varias veces y nunca me quedó bien la dentadura”.

Además otra mujer, del mismo barrio y con los mismos problemas de dolores e hinchazón en la boca, mencionó: “Yo fui el 10 de diciembre, y ya para el 17 tenía la dentadura hecha. Estaba contenta, porque pasé las fiestas de fin de año pudiéndome reír. Pero después se me empezaron a caer los demás dientes. Porque como me dejó las raíces puestas se me picaron y se me hincha toda la cara no puedo comer”, y afirmó una persona que estaba junto a nuestra fuente durante una charla en que nos brindaron todo tipo de detalles y fotografías, sobre los supuestos beneficios de visitar a “la dentista del barrio”, que: “Muchas chicas de acá iban a lo de Ximena, porque cobraba barato y le pagábamos con el Plan. Porque si te faltaban un par de dientes estaba bueno ir y al rato salir con el comedor completo”.

Según expresaron: “El problema era que a veces, los dientes agarrados con esos ganchitos de alambre raspaban un poco, pero te acostumbrás, y hasta te cobra la mitad que un dentista”, con algunas consideraciones muy bizarras sobre los modos de tratar de esta dentista trucha a sus clientes, sumándolos en sus redes sociales. Pidiéndoles cuando los cruzaba en la calle o en alguna reunión barrial, que hagan militancia para ella, sobre todo durante sus campañas políticas en tiempo de elecciones.

Es decir que Ximena Montes generaba un proselitismo barato, se hacía pasar por profesional y se reunía con referentes de distintos espacios políticos, en su intento por escalar posiciones a los codazos en las listas. Pero de todas maneras su comportamiento y su prepotencia, al punto de dejar evidencia que ejerce la Violencia de Género contra su esposo Gustavo Miano, nunca le permitieron llegar a nada ni a alcanzar una banca dentro del deliberativo lujanense. Pero, lo que vale es la intención, dicen. Y mientras tanto se llenaba los bolsillos engañando a uno de los sectores más vulnerables, los barrios periféricos. Donde habitan que menos tienen. Proponiéndoles que: ”Si ganaba una banca, iba a hacer campañas de odontología gratuita para grandes y chicos en los barrios pobres”. Verdaderamente un delirio.

El Colegio de Odontólogos desea resolver esta situación, la que se repite en diferentes distritos, y desean sentar jurisprudencia. Además de eliminar los riesgos a los que esta dentista trucha expone a sus “pacientes” a un contagio masivo de Coronavirus el Luján”. Porque: “Ximena Montes no tiene un aparato de esterilización habilitado para asegurar la desinfección de las herramientas que usa”, por lo que según fuentes judiciales la fiscal Laura Cordiviola citará en breve a Ximena Montes a declarar. Así que veremos cómo continúa el tratamiento de esta causa contra esta falsa odontóloga, la que se promocionaba entre la militancia política y entre los referentes de los demás partidos como una profesional de lujo, con una propuesta al mejor estilo: COMEDOR COMPLETO PARA TODOS.