Reclaman reabrir causas penales por unas 56 muertes por presunta mala praxis en el Hospital de Luján
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El Hospital de nuestra Señora de Luján, envuelto en una indigestión municipal que duró ocho años, reconocida por propios y extraños por su “abundante casting sábana” y por varios funcionarios que atendían de los dos lados del mostrador, ahora vuelve a ser noticia. En esta ocasión por el nuevo embate de Mary Giardullo, que reclama que sean reabiertas todas las causas penales por las muertes injustificadas que se habrían producido en el hospital local, incluidas las causales de muerte de su hijo por presunta mala praxis, en el marco de que Mary se enteró por medio de otra enfermera que una compañera de trabajo le confesó “Me mandé una cagada con el pibe Meneghini”, dado que indebidamente esta enfermera le habría aplicado un medicamento en flujo sanguíneo, lo que habría sido la causal de su muerte, tras 21 días de internación por una simple quebradura de tobillo.
En una extensa entrevista telefónica realizada a Mary Giardullo en este 1ro de noviembre, fecha en la que su hijo hubiese cumplido años, esta Madre del Dolor contó todo el padecimiento que atravesó ante la falta de atención desde el inicio de la internación de Claudio Meneghini, dado que su hijo tenía una simple quebradura de tobillo, y a pesar de estar 21 días internado la prótesis nunca apareció, por lo que su pareja vendió un vehículo para poder contar con dicho elemento. Y así y todo no lo operaban, según sus dichos, hasta que en un momento ella se retiró a su domicilio para higienizarse y alimentarse, y por medio de un llamado telefónico le avisaron que Claudio su hijo había muerto hacía minutos nomás.
Según detalló Mary, una enfermera a quien identificó claramente, vía telefónica dio a conocer a un médico de alguna situación presuntamente padecida por el paciente de la habitación número 6 del Hospital de Nuestra Señora de Luján, y en base a lo que el médico contestó la enfermera le habría aplicado a Claudio Meneghini una dosis indeterminada de “Clorazepán” en sangre, y eso le habría producido la muerte, ya que según denunció esta mamá su hijo “no tenía una convulsión sino el inicio de un paro cardíaco”, según sus palabras.
Tras el fallecimiento de Claudio Meneghini, entre otros 50 casos denunciados en aquel entonces, el poder político no dio explicaciones y todos los esfuerzos por parte de dirigentes, funcionarios, concejales y del propio intendente Oscar Ernesto Luciani fueron puestos en negar la situación, en no posibilitar la conformación de una Comisión Investigadora, y en tratar incluso a través de muchos medios de comunicación locales de tirar la basura bajo la alfombra. Y tan así fue que incluso el concejal radical Carlos Pedro Pérez durante una sesión del ¿Honorable? Concejo Deliberante arremetió contra las madres del Dolor, a fuerza de trompadas y empujones, y generó un escándalo que dejó en la nada el tratamiento de la conformación de esa Comisión Investigadora (un mal punto para la oposición de aquel entonces que no se ocupó de llevar el caso hasta las últimas consecuencias, salvo honrosas excepciones), en lo que terminara con el concejal Pérez preso esa noche, y llevado en un patrullero a la Comisaría de Luján Primera, donde fue escoltado por sus compañeros de banca. Quienes le hicieron el aguante en la dependencia policial hasta que lo liberaron. Aunque de todas maneras nadie quiso explicar nada.
Mary Giardullo nunca bajó los brazos, y enterada de las confesiones de la enfermera interviniente en ese momento a una compañera de trabajo, diciéndole eso de “ME MANDÉ UNA CAGADA CON EL PIBE”, reclama la apertura de las causas penales, y que se cite a declarar a los exfuncionarios, incluso a algunos actualmente en la función pública, como para que su hijo Claudio Meneghini descanse en paz.
