El memorial, ubicado en el barrio San Antonio Sur, es fruto del trabajo conjunto entre la Sociedad de Fomento y el Municipio. El acto contó con la presencia de excombatientes, familiares y autoridades locales.
En un emotivo encuentro que reafirmó el compromiso de la comunidad de Luján con la causa nacional, se inauguró formalmente el Monumento a Caídos y Veteranos de la Guerra de Malvinas en el barrio Hostería Sur. El nuevo sitio de memoria se emplaza en la intersección de las calles Churrinche y La Paloma, un punto que a partir de ahora funcionará como faro de reconocimiento para los héroes de la patria.
Un esfuerzo colectivo
La iniciativa surgió de la Sociedad de Fomento Barrio San Antonio Sur y logró concretarse gracias al Plan de Fortalecimiento Institucional del Municipio de Luján. A través de la Dirección de Entidades de Bien Público, la comuna aportó la mano de obra necesaria y la instalación de luminarias para poner en valor el monumento.
Esta sinergia entre los vecinos organizados y el Estado local permite que el partido de Luján cuente con un nuevo espacio destinado a fortalecer la memoria colectiva y el respeto por nuestra historia.
Emoción y homenaje
El acto estuvo marcado por la presencia de quienes vivieron el conflicto en primera persona. Participaron el vecino del barrio y excombatiente Mario Sper, así como familiares del recordado excombatiente Carlos Alberto Jech. También brindaron su marco institucional los integrantes del Centro de Veteranos de Guerra de Luján y de la Asociación de Veteranos de Guerra de Luján.
El momento de mayor solemnidad se vivió durante el descubrimiento de la placa conmemorativa, encabezado por el intendente Leonardo Boto y el presidente de la Sociedad de Fomento. Posteriormente, el Padre Eugenio Sánchez realizó la bendición de las instalaciones, en un clima de profundo respeto compartido por los numerosos vecinos y funcionarios que se acercaron al lugar.
Memoria activa
La jornada en Hostería Sur no fue solo un acto protocolar, sino una reafirmación de que Malvinas sigue siendo un eje de unión para la comunidad. Con este monumento, el barrio no solo embellece su entorno urbano, sino que asume el compromiso de mantener vivo, día a día, el recuerdo de quienes defendieron la soberanía argentina.