Se realizará un encuentro del Centro Comunitario Andamios Marisa Wagner y el Hospital Interzonal Domingo Cabred. La actividad cuenta con el apoyo del Instituto Cultural de la Provincia y será el miércoles 5 de julio.
El Centro Comunitario Andamios Marisa Wagner y el Hospital Interzonal Domingo Cabred realizarán el encuentro titulado “Andamiajes lujanenses: construyendo una salud colectiva” que se desarrollará en el Salón Cultural y los jardines del Complejo Museográfico Provincial Enrique Udaondo, dependiente del Instituto Cultural. La propuesta, con entrada libre y gratuita, será el miércoles 5 de julio desde las 10:00.
En este primer encuentro se compartirán experiencias a través del arte, para visibilizar las expresiones del trabajo cotidiano de ambos espacios, pensados desde la perspectiva de salud comunitaria y caracterizando desafíos y posibilidades propias de la ciudad de Luján.
El Centro Comunitario Andamios como hoy se conoce se instaura en junio de 2019 de la fusión del CPA Lujan, dependiente de la Subsecretaría De Salud Mental, Consumos Problemáticos Y Violencias en el Ámbito De La Salud, y del Programa de Rehabilitación y Externación Asistida (PREA) del Hospital Interzonal Especializado Neuropsiquiátrico Colonia “Dr. Domingo Cabred”, ambos organismos dependen del Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires. Habilitado para toda la comunidad, la gente puede ir a hacer diversas actividades y estar en contacto con otras personas. Es un un espacio de salud donde el eje está puesto en las ganas de estar en común, para generar encuentros y producir diversos proyectos.
El Hospital fue fundado en 1899 por el médico psiquiatra y sanitarista Domingo Cabred, quien creó la primera colonia de puertas abiertas de América Latina para abordar la salud mental, una especialidad que hasta ese momento solo contemplaba como tratamiento al sistema penitenciario. El método de puertas abiertas, que Cabred trajo de sus viajes por Europa, originó el nombre de una localidad que creció junto a la colonia: Open Door.
En su época de esplendor, el extenso predio rural contaba con un sistema de autoabastecimiento en el que la producción de alimentos (tambo, vivero y granja) era realizada por los propios pacientes.
La actividad no se suspende por lluvia.